Mi angustia es extrema, se parte mi alma y derrama su hiel
Me vuelvo un lacio ser, inquieto buscando un suspiro
Sollozando desde dentro, intentando alcanzar un respiro
Confundido, ciego, tanteando en esta niebla tu boca de miel
El cielo llora, llora con mi alma perdidamente deprimida
Mis manos se enfrían con este hielo turbio que desbasta
La tierra desconsolada en la soledad, con las gotas se desgasta
Tristeza infame que se cuela en mis huesos y mi alma herida
Desmembrados mis versos sobre las hojas indiferentes
Como sangre derramada sobre la mesa, cada letra concebida
Mi piel, ahora seca, esta mordida por salvajes serpientes
Campo de títeres macabros que agobian mis sentidos
Vientos que golpean mis ramas sobrevivientes al tiempo
Dolor de no tener aquí en mis labios tus besos desvestidos
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